Bad Bunny fue una de las caras más llamativas del ‘Royal Rumble’, el último evento de la WWE, la compañía de lucha libre más famosa del mundo. El cantante puertorriqueño era el invitado especial para interpretar su canción ‘Booker T’, en la que colaboró con el luchador que da nombre a este tema y con el que recreó el videoclip en directo.
Sin embargo, Bad Bunny quiso ir más allá y apareció de repente en medio de un combate para meterse de lleno en el mundo WWE. The Miz y John Morrison le pidieron al cantante realizar una colaboración pero el caribeño no accedió. Fue ahí cuando luchadores fueron a buscarlo a su camerino, pero Booker T salió en su defensa.
Tras no poder «vengarse» con el cantante, sí lo hicieron con su equipo musical, destrozando varios aparatos electrónicos de su ‘set’. No obstante, el que sí reclamó venganza en este caso fue el cantante. Bad Bunny apareció en escena en el combate de los dos luchadores con Damian Priest.
Tras un ataque de Priest contra The Miz y Morrison, el puertorriqueño vio su oportunidad para devolvérsela a los luchadores. Pese a los intentos de los jueces de alejar al cantante, este se subió a una esquina del ring y saltó sobre ellos, dejándoles noqueados en el suelo.